Macri y la doble vara de los medios: ¿Cuál es el cambio?
Escribe Marcelo Puella – Frente Nacional de Agrupaciones Peronistas
Con el kirchnerismo había “cepo” cambiario, porque para comprar dólares debía usarse la clave fiscal, pedir autorización a la AFIP y existía un tope de compra. Ahora hay que usar la clave fiscal, pedir autorización a la AFIP y hay un tope de compra… Pero no hay “cepo”: hay una “lógica actual de funcionamiento del mercado cambiario”.
Es interesante. Si el kirchnerismo colgaba un cuadro del Che Guevara en un edificio público, era ideología. Si el PRO sube los retratos de Videla, Galtieri y Bignone a la galería de presidentes de www.casarosada.gob.ar, es “sentido común”.
Si la plaza se llena para despedir a Cristina, se colma de “militantes”. Si la plaza se llena para recibir a Mauricio, se trata de “gente”. Y hay más: el “militante” en la Plaza come “choripán”. La “gente” en la plaza come “sandwiches”.
Cuando aumentaban los precios durante el kirchnerismo, había “inflación descontrolada”. Ahora que aumentan durante el macrismo, hay “sinceramiento de precios”.
Si un kirchnerista quería echar a un funcionario no afín a su ideología, había “persecución”. Si el PRO pretende echar a Sabbatella y Gils Carbó, es “republicanismo”.
Si Cristina habla de Macri, Cristina “ataca” a Macri. Si Macri habla de Cristina, Macri “advierte” a Cristina. Es fuerte y sutil al mismo tiempo.
Una cadena nacional de CFK por semana era un “abuso de poder”. Tres cadenas nacionales en el primer día de presidencia de Macri es “protocolo”.
Milagro Sala, dirigente del FPV, era una “puntera”. Laura Alonso, dirigente del PRO, es una “luchadora”.
Santoro era un radical anti K que se pasó al kirchnerismo porque “lo compraron”. Lousteau era anti PRO que se pasó a Cambiemos porque “fue capaz de dejar de lado cuestiones personales para el bien de la república”.
Cuando aumentaban los precios durante el kirchnerismo, había “inflación descontrolada”. Ahora que aumentan durante el macrismo, hay “sinceramiento de precios”.
Un funcionario kirchnerista era un “ñoqui pagado por todos”. Un funcionario del PRO es círculo íntimo, “gente de confianza”.
Si la Ley de Medios obliga a normalizar frecuencias, es “censura K”. Si Macri saca 678 del aire, es “pluralismo en la comunicación pública”.
Los colectivos hacia plaza de Mayo en la despedida de Cristina llevaban “negros K pagados con los impuestos de todos”. Los colectivos hacia plaza de Mayo para recibir a Mauricio trasladan al “pueblo que llega desde las provincias”.
Si Cristina enviaba fondos a las provincias, lo hacía para someterlas a su voluntad. Si Macri lo hace, es para darles autonomía.
Defender la continuidad de la procuradora Gils Carbó es “politiquería”, defender la continuidad de Fayt a pesar de sus mil años, es “defender las instituciones”.
De hecho, si Cristina proponía una procuradora, estaba embistiendo. Ahora que Macri quiere sacar a la procuradora y poner una propia… Está consensuando.
Si Cristina hubiera nombrado por DNU dos jueces de la Corte Suprema, habría sido un golpe institucional. Ahora que Macri nombró dos jueces por decreto, dicen que se trata de un “golpe de efecto”. ¿Qué independencia judicial prometió Mauri al jurar?
Conclusión: no se vino la noche. Solamente está anocheciendo.