El Presidente del Frente Nacional de Agrupaciones Peronistas Marcelo Puella, coincidió en sus redes con el mensaje del Ministro de Seguridad Aníbal Fernández quien en el programa del domingo en C5N con Juan Amorín, llamó al Presidente Alberto y a la Vice Cristina a sentarse a hablar para de esa manera marcar una línea política a toda la dirigencia justicialista.
“Queda mucho por hacer y el peronismo debe estar unido, lo que será nuestra principal carta de triunfo y para ello, los primeros que tienen que sentarse a saldar sus diferencias son Alberto y Cristina”, comentó Puella y reiteró la afirmación de Aníbal Fernández quien había dicho: “No tengo dudas de que va a suceder».
Además dejó bien en claro que no existen dudas de que el Frente de Todos es competitivo para 2023, porque como lo demostró la historia, “a fuerza del peronismo unido es indiscutible”, aseveró el referente peronista.
Agregó en ese sentido que “si somos capaces de ordenarnos y ponernos de acuerdo, van a tener que transpirar mucho para ganarnos”, aventuró.
Por último convocó a la ciudadanía toda a no perder de vista los hechos de un pasado muy reciente que nos dejó en inferioridad de condiciones frente al mundo entero, tras la deuda que contrajo Mauricio Macri y los fugadores seriales del gobierno de juntos por el Cambio.
“Si los peronistas no nos unimos, el pueblo entero corre el riesgo de quedar a merced de personajes como Milei, Bullrich, o de pseudo dirigentes como la diputada Carolina Píparo quien, por ejemplo votó en contra de la ley de Alcohol Cero, sin reparar en que su marido está acusado de tentativa de homicidio, tras atropellar con su automóvil mientras conducía en esta de ebriedad, a dos jóvenes que aún hoy luchan contra las secuelas de dicho delito”.
Puella terminó pidiendo a todo el Frente de Todos, dejemos la internitas que nos están dañando terriblemente, esto nos pasó en el 2015 y terminamos pagando muy caro ese error. Sino trabajamos para la unidad de nuestro espacio podemos enfrentarnos a rival que no los une un proyecto, sino el odio y la sed de revancha.